Tan pequeña y a la vez tan grande

Tan pequeña y a la vez tan grande. Es sincera, aunque a veces le cuesta decir sus verdades y sentimientos. También es algo bipolar. Tiene mala leche, y a veces piensa sin actuar, pero no hace las cosas con maldad. Siempre quiere hacer lo correcto, y eso le lleva a unas rayadas incomprensibles para el resto del mundo. ¿Ella?, una vaga donde las haya, y una cabezota. Comete errores, y vuelve a tropezar con la misma piedra, como todas las personas de este planeta. Da los abrazos como a mí me gustan, dándote todo su cariño en ellos. En el amor es la más vergonzosa que puede existir, y no se arrepiente de ello. Puede que un día la notes mal, y ni si quiera ella lo sepa. Defiende a los suyos con uñas y dientes. Está loca como ninguna. No dudes en que con ella te vas a reír, porque hacer el payaso es su debilidad. Dice demasiadas tonterías, de esas que no puedes hacer otra cosa más que descojonarte. Sabe perfectamente cuándo una persona está bien o mal. A veces puede parecer que todo le da igual, que nada le importa, pero no es así. Ella se preocupa a más no poder de la gente que quiere, y lo que más miedo le da es perderles. Siempre busca la felicidad, y a veces, como todos, ve la vida como una mierda. Sabe muy bien dar consejos, y más de temas amorosos, siempre está ahí para ayudarte. Es débil y, a la vez, fuerte. Muchas personas no saben apreciarla, pero, ¿sabéis que os digo? ¡Que ellos se lo pierden! ¿Qué está loca? Lo sé, pero eso es lo que más me gusta de ella.

¿Qué es parar el mundo?

Parar el mundo es decidir conscientemente que vas a salir de él para mejorarte y mejorarlo. Para poder moverte y moverlo mejor. En ese tiempo debes intentar que nadie ni nada te cree problemas. Alimentarte de buena literatura, de buen cine y, sobre todo, de la conversación de una única persona que te inspire en este mundo. ¿Y sabes qué...? Luego el mundo te premia. El universo conspira a favor de los que lo mueven. Y ésos son los que lo paran. ¿Tú quieres mover el mundo o que te mueva?

Las 3 Aes y la S

• Analizar la situación.
• Admitir dónde se ha perdido el control.
• Adaptarse a la siguiente dinámica con una actitud nueva, más adecuada.
• Seguir adelante con su vida.

El sexo de los ángeles

+ Celos

- Es que no creo que me engañe, lo que me jode es que haya otros que le puedan gustar.

+ ¿A ti no te pasa eso?

- Sí, pero me aguanto, es que sino, ¿en que consiste el amor?

+ En compartir ideas, deseos, experiencias, pero no vale poner límites en tu vida y menos en la de los demás.

- Pero si no hay unos límites no eres una pareja de verdad, solo alguien más.

+ Lo mejor es que cada pareja encuentre sus propios límites. Imponer las reglas de todo el mundo no hace que una relación sea mejor, o eso creo yo, vaya.

- Sí, pero en una pareja tienes que ser especial para el otro.

+ Eso es otra cosa. Tú y yo nos acabamos de conocer y ya eres especial para mí.

Lo bueno de la vida real

En los cuentos de hadas las princesas siempre acaban con su príncipe azul, pero lo bueno de la vida real es que también pueden casarse con tipos como yo, y no creo que nadie tenga nada que decir.

Es lo que se llama autocontrol

Si fuese un tío normal debería correr tras ella, decirle lo que se le dice a una mujer para conseguir su teléfono e intentar volver a verla, pero verán, yo nunca he sido un tío normal. Puede parecer una locura, pero todo llevaba a pensar que yo era como un gato negro con el que ninguna chica debería cruzarse jamás. Así que si aquel día no salí corriendo tras ella fue por su propio bien.

La oportunidad de mi vida

Estaba condenado a no compartir mi vida con ninguna mujer. Y como un preso encerrado en mi prisión, revivía en bucle los momentos en los que había sido feliz. Resulta curiosa nuestra tendencia a pensar en lo que nos hace sufrir, cuando lo único que nos aliviaría sería el olvido. ¿Pero como hacer para olvidar? Las soluciones más extremas se agolpaban en mi mente y elegí la más extrema de todas...

Deberíais

- Deberíais de estar juntos.

+ Sólo somos amigos.

- Eso no existe.

Yo en cambio...

- Yo también tengo unos cuantos miedos: al dolor, a la muerte.

+ Yo en cambio temo a la vida.

Averigua que quieres decir y dilo

Tienes que empezar a escarbar ahí dentro, tienes que desarrollar todo tu talento, tienes que empezar a usar el cerebro que hay ahí para expresar el precioso corazón que posees.

Lo demás es una ilusión

Desde los inicios de la historia han nacido unos 110.000 millones de personas en el mundo, ni una sola de ellas ha sobrevivido. Hay 6.800 millones de habitantes en el planeta, y cada año mueren unos 60 millones. ¡60 millones de personas! Son al rededor de 160.000 al día. Vivimos solos y morimos solos. Lo demás es una ilusión. Si morimos solos, ¿por qué tengo que pasarme la vida trabajando, sudando y luchando? ¿Por una ilusión? Porque ni tener amigos o novia, ni realizar tareas como conjugar el pluscuamperfecto o calcular la raíz cuadrada de la hipotenusa, me ayudarán a evitar mi destino. Tengo cosas mejores en las que emplear mi tiempo.

Te aseguro que yo sentía algo..

..no me había pasado desde hacía mucho tiempo y he vivido lo bastante para saber que cuando ocurre debes actuar.

El arte de pasar de todo

- No ha mostrado ningún interés.

+ ¿Y tú? ¿Crees que va a ir por ahí con un cartel colgado del cuello? A las mujeres les gusta ser deseadas. Empújala contra la pared y bésala, seguro que te devuelve el beso, y si no lo hace pues lo habrás intentado. Como no hagas algo la perderás.

¿Cuántas veces has querido borrar todos los errores de tu vida?

La vida es como un libro que tú escribes día a día. Es como el diario que guarda todos tus secretos. Como una libreta que aunque sigas escribiendo nunca se acaba. Pero sólo tiene un fallo: Las hojas que no te gusten, no las puedes arrancar. y no existe nada capaz de borrarlo, ni hacerlo desparecer. Lo que escribes, ahí se queda, y eso es para siempre.